domingo, julio 08, 2007

Balance y a otra cosa, mariposa

Creo que cualquiera que haya leído mi blog - sí, me refiero a vosotros tres - habrá llegado a la conclusión de que ZP no es mi político preferido y que el balance de la presente legislatura no me parece precisamente glorioso. Las grandes apuestas de este Presidente han sido el Estatut y la negociación con ETA, y ninguna de las dos le ha salido lo que se dice bien, salvo que el Constitucional y la banda le echen un manubrio. La política exterior se ha caracterizado por pisar los callos de los grandes y retratarnos al lado de los sospechosos. Luego está lo de la Alianza de Civilizaciones, cuyos fruto más reciente ha sido la petición de la comunidad islámica de recuperar la Memoria Histórica de Al-Andalus y la lucha contra la islamofobia, lo cual le está muy bien empleado a ZP, por tonto. Los chicos de las bombas con turbante aún no se han dado por enterados. Todo ello, a costa de una división de la opinión pública como hacía tiempo que no veíamos.

En el apartado positivo, ciertas medidas de corte social (Ley de Dependencia, Carnet por Puntos) frente a otras bastante sospechosas de electoralismo (la Ley de Matrimonios Homosexuales o la reciente subvención a la natalidad, que por cierto a mí me viene muy bien) cuyo coste y alcance no me atrevo a evaluar; sobre todo, el mayor acierto ha sido la elección de Solbes para el Ministerio de Economía, que ha seguido por los fueros en los que estaba en la legislatura precedente. Claro que es mucho más fácil hacer medidas de corte social cuando uno se encuentra las cuentas del Estado saneadas. De la gestión del agua, ni hablamos, salvo que construir desaladoras por un tubo con tal de no hacer el Plan Hidrológico del PP dudo que sea lo más rentable ecológica y económicamente. Especialmente ahora que para que el estado central pueda hacer una acequia tiene que consultar bilateralmente a todas las comunidades por las que pase el riachuelo. Y bueno, también podríamos hablar de lo de Endesa, pero me da la risa floja y acabo de ver mi factura de la luz.

Lo que de verdad verdadera le ha salido de cine al Gobierno ha sido aislar al PP, primero con la inercia del 11-M y después aprovechando el círculo vicioso de crispación que se ha venido produciendo. En el punto actual, eso es tanto un mérito estratégico del Gobierno como un demérito de la actual cúpula dirigente del PP, que no sólo no ha sabido salir de esa dinámica sino que cada vez ha ido mostrando una cara más hosca, con la que sólo conseguirá convencer a los incondicionales pero no arañar votos por el centro. Hombre, algo debe de fastidiar que la única manera posible de formar gobierno para la derecha sea con mayorías absolutas, exceptuando Canarias.

Para desgracia de Rajoy, le ha tocado lidiar con un toro que no era suyo y para el que un político de corte tecnocrático no es la persona idónea. Personalmente creo que Rajoy es bastante más inteligente y mejor parlamentario que Zapatero, pero es difícil demostrarlo cuando a las primeras de cambio la contrarréplica de cualquier miembro del Gobierno es recordar la guerra de Irak. Amén de que lo que ha calado en la opinión pública mayoritariamente es que el PP mintió del 11 al 14-M. Demasiado lastre para estar en le Oposición.

Según las encuestas, Zapatero ganó de calle el último Debate sobre el Estado de la Nación. Y probablemente sea así. He leído íntegramente el discurso de Rajoy y me parece magnífico para un mitin, pero demasiado catastrofista para sede parlamentaria. O sea: agradará a los votantes del PP pero no quitará ni un voto al PSOE.

Así pues, auguro que Rajoy no será presidente, que el PP tendrá que cambiar su cúpula directiva dando entrada de una vez por todas a Gallardón y probablemente a Rato, y que nos quedan otros cuatro años de talante, buenrollismo y orgullo guay. Con nuestro pan nos lo comamos.

Y paso de política hasta el 2008.

No hay comentarios: